UNA HISTORIA FEMINISTA DE LA MÚSICA,DE POLY STYRENE A PUSSY RIOT
Según a quién preguntes, la historia del punk comenzó en Inglaterra con los Sex Pistols o en Nueva York con los Ramones, pero ¿y si, como rezaba la mítica camiseta de Kim Gordon de Sonic Youth, «las chicas inventaron el punk, no Inglaterra»?
Sin entrar en controversias sobre la génesis del fenómeno, lo que sí parece claro es que la historia oficial, como suele ser habitual, ha silenciado el papel fundamental que tuvieron y tienen las mujeres en el origen y futuro de la música de guitarras más visceral.
La periodista cultural y música Vivien Goldman —que a principios de los ochenta grabó un single fundamental en las horas muertas del estudio de PiL— escribe por primera vez una historia del punk desde mediados de los setenta hasta la actualidad en clave femenina.
Goldman explora el fenómeno del punk a partir de cuatro temas fundamentales —la identidad, el dinero, la vida afectiva y la búsqueda de un cambio— que tienen que ver tanto con la creación musical en los márgenes de la industria como con las dificultades inherentes de la mujer en un contexto donde aún impera el patriarcado.