Gallo escribe con dosis de humor sobre los primeros viajes, los amores de verano y, también, sobre la decepción que sobreviene cuando éstos no tienen un final feliz.
Las historias reunidas en Las chicas no lloran, el debut literario de la autora argentina Olivia Gallo, están atravesadas por un tipo de nostalgia muy particular: la del tiempo perdido justo cuando se está comenzando a vivir. Esa sensación de desconcierto que sentimos de jóvenes durante el tránsito de la adolescencia a la edad adulta; ese momento de cambio abrupto, inesperado, en el que parece perderse para siempre un pequeño paraíso, y donde las expectativas optimistas se dan de bruces con la realidad. Olivia Gallo presenta aquí un mundo feliz en apariencia, donde sus personajes descubren el amor platónico, el sexo esporádico, las drogas blandas y el fin de la autoridad de los adultos, pero que en su prosa lírica y sencilla aparece ya envuelto en una bruma desorientadora.
Olivia Gallo (Buenos Aires, 1995) estudió en la facultad de Letras de Buenos Aires, y en 2019 debutó en el circuito literario argentino con Las chicas no lloran, un volumen de cuentos líricos publicado originalmente por la editorial Tenemos las Máquinas y que ya ha alcanzado varias reediciones en su país. Su libro más reciente es Intranquilas y venenosas, un intercambio epistolar que escribió junto a Tamara Talesnik durante el confinamiento de 2020, y que ha publicado la editorial Odelia.