Jerome K. Jerome es recordado principalmente por "Tres hombres en una barca". Una obra maestra de la literatura humorística y uno de los libros más vendidos de su época. Sin embargo, su vida no fue siempre la de un escritor de éxito. La quiebra de los negocios de su familia y las consecuentes dificultades económicas obligaron al joven Jerome a buscarse la vida con trabajos precarios. Entre un empleo y otro, cultivó su pasión por las humanidades y en 1877 decidió abandonarlo todo para intentar la carrera de actor de teatro. Pasó tres años recorriendo Inglaterra como miembro de compañías de teatro itinerantes y regresó a Londres más pobre que antes. Años después, el aspirante actor se convirtió en un escritor humorístico de fama mundial y recuperó sus experiencias juveniles para plasmar este divertidísimo libro de memorias, en el que es fácil reconocer dinámicas y personajes del mundo del teatro que aún hoy en día no han desaparecido del todo.
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Huérfano a los trece años de edad, Jerome Klapka Jerome (1859-1927) empezó a trabajar recogiendo el carbón que caía a las vías del tren. Poco después se unió a una compañía de teatro muy modesta, y a los veintiún años ya escribía sátiras y relatos, la mayoría rechazados por los editores de la época. Maestro, mozo, pasante, publicó su primer libro en 1885, pero no fue hasta Tres hombres en una barca (1889) cuando saltó a la fama mundial. A su muerte, y tras más de veinte obras publicadas, era considerado uno de los mayores exponentes de la literatura cómica inglesa de todos los tiempos.
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