Una ventana a la amistad masculina: la corporalidad y los afectos truncados, torpes, subterráneos, que se dan en una pandilla de chicos de barrio durante los2000.
En Los bloques naranjas lasrelaciones entre hombres están atravesadas por el espacio geográficoque se habita: la ciudad. Es este un proyecto de poesía en prosa queintenta traer al presente el pasado de una adolescencia y una juventud no muy lejanas. ¿Qué ocurrirá en el futuro con todo lo que no se dijo cuando se tuvo la oportunidad?, se pregunta este libro.
LuisDíaz nos cuenta, precisamente, todo aquello que se sintió pero no sedijo.
Este libro explora la amistad masculina, siempreatravesada por la imposibilidad de comunicación, los afectos truncados y subterráneos, la corporalidad torpe y dolorosa. Abre una rendijaque nos permite vislumbrar lo que bulle bajo el hermetismo y latorpeza afectiva de las masculinidades adolescentes. Un librorompedor, áspero y sensible a partes iguales.