Mezclando comedia y novela de espías, Jonathan Coe ha escrito una estupenda muestra del mejor humor británico
«Una novela divertidísima» (Cressida Connolly, The Spectator).
«Un divertimento de altísimo nivel literario, y más disfrutable si cabe por estar basado en las dimensiones más excéntricas de la realidad, que son la fuente de inspiración de las mejores novelas» (Robert McCrum, The Observer).
Bruselas, primavera de 1958. Bajo el plateado resplandor de las icónicas bolas del Atomium se inaugura la Exposición Universal. Un acontecimiento adornado con bonitos mensajes de concordia en plena Guerra Fría que pretende ser un escaparate de la floreciente sociedad de consumo: la energía nuclear se presenta como una inocua fuente de abastecimiento ilimitado y las aspiradoras y demás artilugios domésticos americanos dejan boquiabierto al público europeo.
El rancio comité británico sobrelleva como puede las inevitables concesiones a la modernidad. Como contrapeso y orgullosa muestra de las viejas tradiciones, decide colocar un pub en su pabellón. Para supervisar el buen funcionamiento de este estandarte de las esencias patrias y de paso controlar las tendencias dipsómanas del encargado, envían a un joven funcionario, Thomas Foley, casado y con una hija pequeña.
En la Expo de Bruselas, Foley descubrirá un mundo cosmopolita muy alejado de la grisura de su vida en Londres; coqueteará con Anneke, una encantadora azafata flamenca, y conocerá a un periodista ruso, a dos flemáticos espías británicos dados a filosofar y a una ingenua actriz americana contratada para hacer demostraciones del funcionamiento de las aspiradoras en el pabellón de su país.
Jonathan Coe (Birmingham, 1961) estudió en las universidades de Cambridge y Warwick. En Anagrama ha publicado las novelas: ¡Menudo reparto! (Premio John Llewellyn Rhys y, en Francia, Premio al Mejor Libro Extranjero): «El horror y el humor van de la mano en esta novela, a la que habrá que recurrir en el futuro cuando uno quiera saber qué sucedió en la Inglaterra de los años ochenta» (Ramón de España); La casa del sueño (Premio Writers’ Guild of Great Britain Best Novel y, en Francia, el Premio Médicis Extranjero): «Si se organizase un festival de escritores verdaderamente originales, habría que invitarlo a él» (Javier Aparicio Maydeu, El Periódico);El Club de los Canallas (Premio Arzobispo Juan de San Clemente, otorgado en Santiago, y Premio Bollinger Everyman Wodehouse): «La más colorida de las novelas sobre los años más grises» (Rodrigo Fresán, El País);El Círculo Cerrado: «Retrato perfecto de la Inglaterra de finales del siglo XX, lleno de sátira. Un libro altamente devorable» (Kiko Amat, La Vanguardia);La lluvia antes de caer: «Si buscan novelas que no se lean de un tirón y traten al lector con respeto, si les gusta desentrañarlas y demorarse en ellas, háganse con un ejemplar» (Manuel Rodríguez Rivero, El País);La espantosa intimidad de Maxwell Sim: «¡Genial!... Lo tiene todo. Buenísima, apasionante, divertida, cínica, tierna, única; el final es deslumbrante» (Javier Puebla, Cambio 16); y Expo 58: «La novela que habría escrito Graham Greene si hubiera leído más de la cuenta a un Evelyn Waugh poderosamente nostálgico» (Laura Fernández, El Mundo).
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