Locas marca el inicio de una saga de mujeres fuertes, naturales, tiernas e independientes de entre las que sobresalen Margarita Luisa -Maggie- Chascarrillo, y Esperanza Leticia -Hopey- Glass, vectores de una saga que conoció sus primeros compases en la revista Love & Rockets, exponente del nuevo underground de los 80, para pronto alzarse como uno de los clásicos sin discrepancia del tebeo contemporáneo.
Corren los primeros años 80 en el sur de California. Maggie, indecisa y emocional, amamanta su juventud en los cuatro acordes del punk-rock, cuya eclosión está infundiendo nuevas energías en el ánimo de una generación antiautoritaria y decepcionada. En el idealismo y la velocidad de esa escena se mueve también Hopey, un temperamento que entiende la anarquía del corazón como única ideología sensata.
Corren los años 80 y algo mucho más grave que un romance está a punto de prender entre ambas mujeres, una relación compleja y verdadera, tronada y magnífica, similar a un rayo de esperanza y dignidad en un mundo tan poblado como defectuoso.
Locas marca el inicio de una saga de mujeres fuertes, naturales, tiernas e independientes de entre las que sobresalen Margarita Luisa -Maggie- Chascarrillo, y Esperanza Leticia -Hopey- Glass, vectores de una saga que conoció sus primeros compases en la revista Love & Rockets, exponente del nuevo underground de los 80, para pronto alzarse como uno de los clásicos sin discrepancia del tebeo contemporáneo.
Jaime Hernandez nació en 1959 en Oxnard, California, donde creció en compañía de su hermana y sus cuatro hermanos, en el seno de una familia de inmigrantes mexicanos. El interés por los cómics le fue transmitido por la afi ción lectora de su madre, que le descubrió la obra de autores hoy clásicos como Jack Kirby o Steve Ditko y las tiras de prensa Archie y Peanuts. La revista Mad le abrió los ojos a lo satírico, pero la verdadera revolución interna le llegó cuando uno de sus hermanos trajo a casa un ejemplar de Zap Comix, la mítica revista de Robert Crumb. A esa atracción por el cómic underground se sumaría la eclosión en Los Ángeles, a fi nales de los años setenta, de una escena punk rock que iba a impregnar los guiones y los dibujos de Jaime de ideales anárquicos y referencias populares, todo ello incorporado a un microcosmos de personajes realistas y defi nidos más allá de cualquier cliché. En 1981, junto a sus hermanos Beto y Mario, fundó la revista Love & Rockets, un soporte amateur en el que publicar sus historietas que al año siguiente pasaría a formar parte del soberbio catálogo de la editorial Fantagraphics. Desde entonces, Jaime ha ido desarrollando el universo de Locas y cosechando multitud de premios en todo el mundo. |